Hamedán

Hamedán   

Hamdán, la primera capital de los medos, fue fundada en el siglo VII a. C. por órdenes del primer rey de Irán, Deioces. Los medos llamaban esta ciudad Hegmataneh, mientras que los griegos la llamaban Ecbatana cuyo significado es lugar de reunión, donde se reunieron y eligieron a Deioces como el primer rey de Media. La minoría de la población de Hamedán la formaban los cristianos y los judíos por la razón de que la tumba de Ester y Mardoqueo, dos personajes judías cuya tumba es el lugar de peregrinación más importante para los judíos en el país, se encuentra en esta ciudad.

Entre las artesanías de Hamedán se puede  hacer  referencia a una  cerámica que  data de hace siete siglos. Las ciudades de Hamedán y Lalejin son los centros de cerámica hecha en Irán.

Inicialmente, las fronteras occidentales de los principados medos, independientes entre sí, no se extendían mucho más allá de las fronteras occidentales de la llanura de Hamedán. Su territorio original de comunicación, como lo conocían los asirios durante el período comprendido entre el último tercio del siglo IX y principios del siglo VII a. C., estaba muy delimitado por el norte y el noroeste. Los medos no tuvieron más alternativa que expandir su territorio por el suroeste y ocuparon el valle de Zagros.

Esta ciudad es famosa por los grandes eruditos quienes nacieron y crecieron en ella como Baba Taher, Mirzadeh Eshqi y Avicena.

Ecbatana

Según Heródoto la antigua ciudad de Ecbatana es un conjunto arquitectónico construido sobre una colina, rodeado por siete círculos de murallas de modo que las almenas de cada muralla superaban a las del próximo círculo. Las almenas de estos círculos están pintadas de varios colores y las de los dos círculos interiores están cubiertos de plata y oro, respectivamente. Según las inscripciones aqueménidas en el siglo VI a. C. los orfebres de Media adornaban las paredes de palacios reales de la capital imperial de Susa. El arte de los medos, sin embargo, sigue siendo un tema de especulación. Al parecer, esta situación perdurará hasta que se descubran y estudien los palacios reales de Ecbatana. En el complejo museístico anexo al sitio arqueológico destaca una cerámica del tercer milenio a. C.

Mausoleo de Ester y Mordejai

Hamedán es el guardián de uno de los eventos más importantes de los judíos, Purim. De hecho, esta fiesta se celebra anualmente el 14 del mes judío Adar, la cual recuerda a la salvación milagrosa del pueblo judío mediante la intervención de Ester, una joven judía que ocultaba sus orígenes judíos. Amán, el ministro malvado del rey aqueménida Jerjes I, le había pedido el holocausto de todos los judíos de su reino. En Purim se lee en voz alta el libro de Ester.

Mausoleo de Avicena

Avicena (980-1037 d. C.) nació en Afshana, una aldea cerca de Bujará en Jorasán. Al cabo de unos años, él junto con su familia se trasladó a Bujará, la capital de los samaníes donde fue el activo centro cultural del país. Avicena se dedicó a estudiar los saberes de la época y completó sus primeros estudios bajo el control de los maestros más prominentes de aquel tiempo. Dada la disponibilidad de maestros y bibliotecas, la alta posición de su padre en la administración samaní y su precocidad en la carrera medicina, a los dieciocho años, gozaba de fama como médico y amplió sus conocimientos en todas las ciencias griegas. Tras el fallecimiento de su padre, se le asignó un puesto administrativo, el de gobernar el distrito. Su obra magna, el “Canon de Medicina”, se utilizaba como un libro de referencia durante siglos incluso en Montpelier hasta 1650. A pesar de que sus obras se limitaron al campo de la medicina, tenía un gran interés en música, metafísica, química, filosofía y astronomía.

El Mausoleo de Avicena, construido en 1954, es un complejo ubicado  en la plaza de Avicena y cuenta con una biblioteca, un pequeño museo y una torre con forma de huso inspirada en la Torre Kavus.

Piedra del León (Shir-e Sangi)

No está claro si la estatua es el símbolo de los medos o data de la época de Alejandro Magno cuando la construyó para conmemorar a su amigo, Hefestión Amíntoros. Esta pieza es una de las más célebres entre los muros de piedra y arcilla y estructuras palaciegas que se encuentran en el lugar. 

Mausoleo de Baba  Taher

Un moderno edificio dedicado a Baba Taher, poeta sufí del siglo XI. La torre situada en el corazón de un jardín ofrece vistas panorámicas de Hamedán. El pintoresco barrio, con sus calles estrechas y paseos cubiertos, sigue siendo un encanto de la ciudad. Cerca de la Plaza Baba Taher hay muchas tiendas de cerámica y porcelana que están entre las más famosas. El mausoleo fue reconstruido en 1970.

Ganjnameh

Ganjnameh consta de dos inscripciones talladas en la ladera de una colina rocosa de los montes Alvand hace 2500 años, a 5 kilómetros de Hamadán, con el fin de conmemorar las hazañas de los reyes Darío el Grande y su hijo Jerjes. Los dos paneles cubiertos de escritura cuneiforme tienen veinte líneas de texto en tres idiomas babilónico, persa antiguo y elamita. El que está a la izquierda pertenece a Darío y el otro a su hijo.

La traducción de la inscripción del rey Darío:

El Gran Dios Ahura Mazda, el más grande de todos los dioses que crearon esta tierra, el cielo y las personas; quien les dio felicidad; quien hizo rey a Darío, un rey excelente entre muchos reyes, gobernante excelente entre muchos gobernantes. Yo soy el gran rey Darío, rey de este inmenso reino con territorios lejanos, soy hijo del monarca aqueménida Histaspes.

La traducción de la inscripción del rey Jerjes:

El Gran Dios Ahura Mazda, el más grande de todos los dioses que crearon esta tierra, el cielo y las personas; quien les dio felicidad; quien hizo rey a Jerjes, un rey excelente entre muchos reyes, gobernante  excelente  entre muchos  gobernantes. Yo soy el gran rey Jerjes, rey de este inmenso reino con territorios lejanos, soy hijo del monarca aqueménida Darío. A escasos metros de las inscripciones hay una hermosa cascada de 9 metros de altura.

Gonbad-e Alavian

Un monumento histórico de forma cúbica que guarda los restos de la familia Alaví, una familia numerosa durante el período selyúcida (1051-1220). Aunque la cúpula ha sido sustituida por un techo, la mezquita ha sido bien conservada. El salón central es de planta cuadrada, flanqueado por cuatro pequeñas torres. Los adornos de estuco, los zarcillos florales de las paredes exteriores y las decoraciones geométricas del mihrab son los fascinantes detalles de este monumento.

Cueva Ali Sadr

La cueva acuática más grande del mundo, ubicada a 75 kilómetros al noroeste de Hamedán en un pueblo del mismo nombre. Hamedán tiene un clima seco y frío y el promedio de precipitaciones anuales es de 300 milímetros. Los geólogos creen que las rocas de esta montaña pertenecen al segundo período geológico, el Jurásico (190-130 millones de años atrás).

La temperatura de la cueva es casi siempre de 16 grados, mientras que la altura es de unos 40 metros. La longitud de la cueva es de unos dos kilómetros y hoy en día, gracias a intervenciones específicas, se pueden visitar los pasillos de la cueva donde hay varias zonas con estalactitas gigantes y estalagmitas maravillosas. Visitar la cueva requiere tanto ir a pie como en barcos especiales, guiados por guías locales.