Irán
“El imperio de belleza: las mil y una noches”
9 días/ 8 noches
“El imperio de belleza: las mil y una noches” es el tercer itinerario del estilo “relajado y cultural”, el que sintetiza dos objetivos en un mismo viaje. Definiendo el estilo relajado y cultural, pensamos en atender tanto las distintas necesidades como los gustos culturales. De hecho, cada itinerario nos dirige hacia una experiencia nueva, haciendo la cultura local viva con una estrategia particular, creada para los amantes de paisajes típicos y ciudades maravillosas de Irán. Lo destacable en este viaje es fijar el enfoque en la coalición entre las ciudades de cuento de hadas y paisajes pintorescos de Irán. Este estilo les ofrece a los viajeros la oportunidad de reflexionar durante el circuito y pernoctación en las ciudades más espléndidas de Irán.
La duración de los viajes suele ser limitada. A veces, no hay tiempo para que nos sentemos en un rincón del bazar a tomar un café y contemplar el bullicio urbano, para que nos quedemos en nuestra habitación y descansemos, para que paseemos por barrios populares o zonas de lujo y para que detengamos delante de las montañas pintorescas y respiremos profundamente y tomemos fotos. Muchas veces nos ha pasado que teníamos que rechazar estos caprichos e irnos. El estilo relajado y cultural es creado precisamente para cubrir estos tipos de necesidades, aunque parezcan triviales, pero son muy valiosos por su influencia en nuestros recuerdos del viaje. En este tipo de viaje, hemos intentado dedicar el máximo tiempo posible a observar el mundo que nos rodea sin preocuparnos por el tiempo. Pensamos en crear un itinerario menos exigente y más relajante para poder caminar lentamente y fijarnos en los detalles de rostros, ciudades y paisajes. De hecho, al tener más tiempo disponible, podemos decidir a qué hora salir de la habitación.
El estilo relajado y cultural nos aporta la capacidad de elegir tanto el tipo como la duración del viaje. Sencillamente, elija las fechas e infórmenos de su motivo: relajación, boda, aniversario de boda, celebración de cumpleaños, etc. Además de conocer los lugares más bellos y fascinantes, nuestro fotógrafo les acompañará en la etapa más pintoresca para fotografiar los momentos inolvidables a lo largo del viaje.
Lo que distingue el viaje a Irán de otros viajes es el deseo de volver inmediatamente a este país. El punto más sorprendente del viaje a Irán será, sin lugar a duda, la amabilidad y hospitalidad del pueblo iraní. La gente iraní deja un recuerdo inolvidable en la mente de los viajeros.
SALIDA/ REGRESO | Aeropuerto Internacional IKA | ||||
HORA DE SALIDA | Estar presente en el aeropuerto con una antelación de 3 horas antes de la hora de salida. | ||||
INCLUIDO |
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NO INCLUIDO |
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Día 1 ; País de origen – Teherán
Salida en el vuelo programado a la capital de Irán, Teherán, ubicada al pie de las montañas Alborz. Encuentro en el aeropuerto con el guía de SITO TRAVEL. Traslado al alojamiento y registro de entrada.
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Día 2 ; Teherán
Desayuno. El día está dedicado a visitar lugares particulares de la megalópolis iraní. Antes de empezar, hay que saber la Revolución iraní (1979) no es el inicio de la historia de Irán, sino más bien un hito. El nacimiento de Irán moderno se remonta al año 1925, cuando Reza Pahlaví ascendió al trono y la dinastía Qajar fue depuesta. Él, disfrutando del apoyo del clero chiita para llegar a poder, abandonó su alianza con el clero y desarrolló campañas para modernización y secularización del país. Con los ingresos petroleros el sah pudo establecer un nuevo estado basándose principalmente en dos pilares: el ejército y la burocracia.
Por la mañana vamos al norte de Teherán, una zona interesante para observar el progreso arquitectónico de Teherán moderno. Además, tenemos la oportunidad de visitar el Palacio de Niavaran el que acogió a los políticos más importantes del mundo en los años sesenta.
Después de un receso para almorzar en un restaurante de clase media alta, damos un paseo por el bazar de Tajrish y luego regresamos al hotel caminando por la hermosa calle Valiasr bordeada de árboles.
- El Palacio de Niavaran ha presenciado muchos de los eventos escritos en los libros históricos incluyendo el esfuerzo modernizador de la antigua Persia. Este palacio fue el último refugio de Mohammad Reza Pahlaví antes de huir del país. Visitándolo, veremos los objetos que habían dejado antes de su salida. El palacio de Niavaran representa una colección de objetos históricos contándonos un fragmento de la historia moderna de Irán antes de la Revolución islámica. Lo destacable de esta colección son certificados de piloto de la aeronave de las fuerzas armadas iraníes perteneciente a Reza Sah, hijo de Mohammad Reza Sah, los obsequios a los niños del Sah por parte de los poderosos del mundo en visitas oficiales, una pintura de la reina, Farah Diba, sonriendo mientras observa a su hijo Reza en un traje de piloto trepado a un árbol.
Hoy en día, Teherán desempeña un papel fundamental en la historia moderna de Irán ya que ofrece a los viajeros lugares extraordinarios, bares, parques y zonas recreativas. La preocupación iraní por los desarrollos artísticos, las recientes intervenciones arquitectónicas y el resurgir de muchos cafés de estilo tradicional han hecho de la ciudad un fascinante laberinto que reserva al visitante una sorpresa en cada rincón.
- Por la tarde, damos un paseo por el Puente de Tabiat (Pol-e Tabiat), obra moderna de la capital iraní, Teherán. El puente es una zona peatonal, construida sobre una de las carreteras principales de la cuidad conectando dos colinas verdes. El Puente de Tabiat fue diseñado por una mujer iraní de 26 años cuyo nombre es “Leila Araqian”. Tras su inauguración en 2014, ha ganado muchos premios internacionales. La diseñadora ha expresado que el motivo de esta obra fue acercar a la gente.
Más tarde, vamos a una de las cafeterías frecuentadas por jóvenes artistas, escritores y los habitantes de la megalópolis en otro lado de la ciudad.
- Palacio de Niavaran
- Almuerzar en un retaurante típico en Niavaran
- Puente de Tabiat
- Café Tehroon
Día 3 ; Teherán– Shiraz
Traslado al aeropuerto nacional para tomar el vuelo de Teherán a Shiraz. Llegada a Shiraz. Encuentro en el aeropuerto con el chófer. Traslado al alojamiento y registro de entrada.
La ciudad de Shiraz se trata de la capital de la región administrativa de Fars o Pars. Un solo momento de reflexión sobre este último vocablo es suficiente para entender que nos encontramos en el corazón geográfico de la historia de Irán, la región donde Darío mandó edificar la capital de su imperio: Persépolis, la ciudad de los persas.
La relevancia histórica de la región no se limita a la época aqueménida, pues su capital se trata de una ciudad clave en la historia de Irán. En Shiraz la poesía persa se vuelve tangible; los jardines, bazares y mezquitas de su centro histórico, impregnados de cultura, envuelven al viajero en su visita. Los habitantes de la ciudad se refugian en sus casas al mediodía para reaparecer en torno a la ciudadela Arg por la tarde, donde la actividad prosigue hasta altas horas de la noche.
Los shirazíes son conocidos por su gusto por la naturaleza y las comidas campestres, y son considerados como las personas más animadas y divertidas de Irán. Para descubrir la atmósfera dionisíaca de Shiraz (el nombre de la ciudad lo dice todo, ya que hace referencia a la forma de una serpiente), el viajero no debe dejar de visitar la tumba del poeta y místico persa “Hafez” o recorrer las calles del bazar Vakil, el lugar donde tantos comerciantes europeos llegaron en busca del famoso producto del dios Baco. Comprensión de la atmósfera poética de Shiraz no será posible sin visitar dos lugares espléndidos de la ciudad: el Jardín de Eram, un ejemplo típico del Jardín Persa, y el mausoleo de Hafez Shirazí es el gran poeta del siglo XIV, un místico sufí. La dulzura de la filosofía persa nace en sus poemas. Lo que inmortaliza al poeta está más allá del significado de su poesía, su pensamiento “sufí”, que lo hace destacado para todos los lectores. Sorprende la vinculación de los versos de Hafez con Baco y Venus. Por lo tanto, leer el Diván de Hafez es como dar un paseo por su jardín celestial para comprender la contradicción que existe entre el dulce estilo iraní y la modernidad: ¡Puede que parezca subversivo este poema!
- Por la tarde salimos del hotel para dar una vuelta en el complejo magnífico del bazar Vakil, único debido a su arquitectura de ladrillos de colores y los techos arqueados para mantener el aire fresco en verano y el calor en invierno.
- Caravanserai Moshir: originariamente un bazar tradicional, ha sido utilizado como museo y restaurante tradicional y tetería. Después de la revolución islámica estuvo cerrado durante algunos años. Se ha convertido en un lugar donde se producen artesanías y productos de todo tipo. Se encuentra junto al bazar Vakil.
Paramos en una cafetería de las que están ubicadas cerca en Saray-e Israfil para absorber la atmósfera poética y la serenidad presente de esta ciudad, tomando un helado de azafrán o infusión de bergamota, la aroma por excelencia de Shiraz. En la cercanía de Saray-e Israfil hay restaurantes típicos muy adecuados para cenar y pasar una velada en serenidad y relajación.
- Vuelo doméstico a Shiraz
- Jardín de Eram
- Mausoleo de Hafez
- Bazar Vakil
- Caravanserai Moshir
Día 4 ; Shiraz – Persépolis
- Por la mañana después del desayuno, visitamos la Mezquita Nasir-ol-Molk, con sus coloridos azulejos, donde el término “elegancia” encuentra su verdadero significado. El clima primaveral de Shiraz no se refleja accidentalmente en las paredes, ventanas de vidrio y exquisitas decoraciones de azulejos. Esta mezquita es una obra maestra de los finales del siglo XIX, también conocida como “la Mezquita Rosa”, siendo un lugar muy acogedor, donde el mundo cromático de pétalos de rosa, iris y demás llama la atención a primera vista.
- Después de una caminata de 10 minutos llegamos al pabellón y el jardín de Narenjestan, también conocido como el jardín de Qavam, el que se remonta a la época de Qajar. El nombre del jardín “Narenjestan” proviene de naranjos agrios o bergamota, por lo cual no nos sorprende que Shiraz sea la ciudad más famosa por sus bergamotas que se encuentran en las calles de la ciudad. Narenjestan era un lugar donde la gente iba con fines administrativos y se celebraban reuniones públicas, así como las entre dignatarios y nobles de Qajar.
- Después de comer, partimos hacia Persépolis es una ciudad ceremonial, construida por Darío I el Grande en 524 a.C. para celebrar la fiesta Nowruz (Nuevo Día), el Año Nuevo persa. Como venganza por los saqueos de Jerjes I en las guerras Médicas, Persépolis fue conquistada y quemada por Alejandro Magno. En la excursión a Persépolis se explica minuciosamente la magnífica ciudad, construida por los mejores artesanos del mundo conocido, quienes percibieron salarios y seguros de acuerdo a la ley real. En este lugar, llegaremos a una profunda compresión de su arquitectura. Entre las ruinas, podemos visitar los majestuosos palacios que nunca dejan de impresionar a los viajeros: el Palacio de las 100 columnas donde el rey solía recibir a los generales y la Sala de audiencias de la Apadana con una planta cuadrada, seis filas de columnas de 19 metros de altura y escaleras de acceso representando las ceremonias de Satrap y los soldados del imperio llamados la Guardia Eterna.
Al atardecer nuestro fotógrafo aprovechará la luz perfecta para capturar los momentos más agradables de su viaje a lo largo de la excursión a Persépolis.
A tiro de piedra del sitio arqueológico hay una estructura histórica actuando como un hotel, la cual una vez acogió a los arqueológicos y líderes de un equipo que trabajaban durante las excavaciones de Persépolis en los años 1930-40. En las décadas 60 y 70, Mohammad Reza Pahlaví, el Sah de Irán, y su esposa Farah Diba acudieron a este hotel para la Celebración de los 2500 años del Imperio Persa.
- Mezquita Nasir-ol-Molk
- Jardín de Narenjestan
- Excursión a Persépolis
Cena y alojamiento en el hotel Apadana
Día 5 ; Persépolis – Isfahán
Después del desayuno, nos vamos a Isfahán, el punto culminante del itinerario. Esta ciudad es una imagen histórica que completa el viaje a Irán. No fue casualidad que Isfahán atrajo la atención de Pasolini para dirigir algunas de las escenas de su película en la plaza de Naqsh-e Jahan. En cuanto a esta ciudad, hay una frase persa: Isfahán es la mitad del mundo. El florecimiento de la arquitectura islámica-iraní nació aquí en la plaza Naqsh-e Jahan, donde el azul turquesa domina las mezquitas y el cielo sobre la plaza. A lo largo de tiempo, el antiguo campo de polo fue convertido en el hogar de talleres de arte valiosos. La era safávida corresponde al tercer Imperio persa, el que restauró el poder de Irán y estableció un nuevo país basado en relaciones políticas, religiosas y militares. La existencia de la catedral de San Salvador (también llamada catedral de Vank) dirigida por la comunidad cristiana armenia desde 1605, hace un buen ejemplo de esta ciudad. Sin embargo, el poder Safavida es admirado por el arte, y por lo tanto, se considera una etapa del “Renacimiento” de la civilización, cultura y arte persa. El período del Renacimiento islámico en Irán llega a su auge bajo el gobierno de Shah Abbas I (1629-1587).
En Isfahán, en cuestión de segundos, el sueño de cada viajero del Medio Oriente se hace realidad: Irán y el atractivo del Renacimiento. Sólo hay que pensar en los murales del Palacio de las Cuarenta Columnas (el Palacio Chehel-Sotún) o el magnífico techo del Palacio de Música, Ali Qapu.
La tarde está dedicada a visitar la plaza y luego a caminar por el antiguo bulevar Chaharbagh el que nos lleva al viejo (el puente de 33 arcos). Aquí en Isfahán, al terminar una visita, comienza otra, y el viajero se prepara inconcientemente para escuchar las narraciones de la ciudad, como si Shahrzad las estuviera leyendo directamente de “las mil y una noches”.
Después del paseo por el antiguo puente, iremos a cenar en un restaurante tradicional en el centro histórico para probar los típico platos persas.
- Bulevar Chahrbagh
- Si-o-Sse pol
Hotel Abbasi o hoteles similares
Día 6 ; Isfahán
- Por la mañana visitamos la plaza real o Naqsh-e Jahan (la imagen del mundo) situada en el centro de la ciudad, rediseñado por Shah Abbas I. Hay dos arcos en la gran plaza central de Naqsh-e Jahan (512 por 163 metros). En la parte inferior están todos los talleres de artistas donde se producen y venden la mayoría de los productos de artesanías iraníes, como miniaturas, trabajos en turquesa, esmaltes y manteles tradicionales. La plaza Naqsh-e Jahan solía acoger a la élite de hombres de negocios que buscaban el refinamiento artístico. En esta plaza, aún quedan los postes de polo las que se construyeron con el fin de limitar el campo de polo hace 400 años.
- Después de la visita, regresamos al hotel para un breve descanso y por la tarde vamos a descubrir el barrio histórico de Jolfa.
La multietnicidad iraní es un factor importante para comprender el Irán de hoy. Mientras que algunos de los nómadas actuales llevan siglos en la meseta iraní, otros grupos étnicos como los turcomanos o seguidores de otras religiones, como los cristianos, llegaron a Irán por razones geopolíticas y reconocieron la tolerancia de este país hacia otras etnias y religiones. Basta con pensar en el caso particular de los armenios que se vieron obligados a emigrar a Irán por orden directa de Shah Abbas I. De hecho, en la década de 1920, los armenios de la región de Julfa habían dejado para siempre su tierra devastada debido al conflicto continuo entre los otomanos y los safavids, y tras haber llegado a Isfahán, el patirarcado armenio inició una nueva fase socio religiosa constituendo nuevas sedes y comunidades.
La región de Jolfa en Isfahan recibió a los armenios, y Shah Abbas I, en un manuscrito firmado por él mismo, les permitió establecer nuevas relaciones comerciales y religiosas, dándoles una libertad especial, totalmente apoyada por la corte Safavida. Los armenios abrieron una ruta comercial valiosa en el corazón de Isfahán, la capital safávida. Además, la oficina del califato armenio se centralizó principalmente mediante la publicación de nuevos textos religiosos utilizando la invención de Gutenberg en Irán. La arquitectura y los detalles de los murales de la Catedral de Vank sorprenden a cualquier turista.
La tarde está dedicada a caminar en el distrito Jolfa y tomar un café o infusiones persas y para la cena nos trasladamos a otra parte de Jolfa para relajarnos y conocer diferentes lugares frecuentados por los jóvenes de la zona.
- Plaza Naqsh-e Jahan
- Pasear por el distrito de Jolfa
- Cena en un restaurante en el barrio armenio
Día 7 ; Isfahán – Natanz – Abyaneh – Kashan
A la última hora de la mañana, salida hacia Natanz y luego Continuamos el viaje a lo largo del pie de la montaña Karkas para unirnos a una aventura increíble, pasear por uno de los pueblos tradicionales más antiguos de Irán, Abyaneh, en un valle. Este pueblo, con una altitud más de 2200 metros sobre el nivel del mar, re remonta a la época aqueménida del siglo IV a.C. Abyaneh, caracterizado por su tono ocre rojo de las casas, está rodeado por las ruinas de la dinastía sasánida pertenecientes al siglo III d.C. Otra característica de este pueblo es la flor rosa dibujada sobre las bufandas largas blancas de las mujeres. (Dependiendo de la estación y el tiempo esta visita puede incluirse o excluirse en el itinerario)
Habiendo visitando Abyaneh, partimos hacia Kashan
Kashan representa un modelo ejemplar para conocer mejor su cultura local. Además de la existencia de esta colina milenaria, hay villas del siglo XIX, llamadas las casas bioclimáticas. Es necesario saber que Kashan tiene un clima desértico y veranos muy calurosos. Las casas en Kashan se han construido de una manera especial para que sea fácil enfriar o calentar las habitaciones en función de la estación. La importancia de la ciudad no está basada sólo en la variedad de las casas, sino que es conocida principalmente por la producción de agua de rosas de alta calidad. De hecho, el viaje a Irán ya atrae su aroma original, el de los pétalos de rosa cultivados en las colinas del centro de Irán. Esta hermosa ciudad, creada en un oasis, aún alberga algunas de las casas tradicionales más hermosas de la zona. La estancia en esta ciudad consiste en pasar una noche tranquilamente en un lugar de cuento de hadas o en una villa del siglo XIX que ha mantenido los criterios bioclimáticos adaptándose al recibir huéspedes. Justo antes de partir hacia el desierto, visitamos el antiguo hammam-e Sultan Amir Ahmad (Casa de baños del Sultán Amir Ahmad), un complejo termal dividido en tres zonas diferentes: frigidarium (el lugar de tomarse baños fríos), tepidarium (el cuatro de baños tibios), caldarium (un cuarto con baño caliente). Lo que destaca la belleza de esta casa de baños es la decoración de las paredes y la ubicación de las piscinas en la primera habitación. Cada espacio se reservaba exclusivamente para una clase social particular: los descendientes del Profeta, los clérigos, los nobles, los mercaderes y los campesinos.
Después de visitar el hammam y un breve descanso, vamos al bazar de Kashan, uno de los bazares más largos de Irán, ofreciéndonos la oportunidad de explorar el saray y los patios internos de estilo típico iraní y oriental. De hecho, Saray-e Amin Oddoleh puede considerarse el patio más majestuoso del bazar rodeado por las tiendas de antigüedades y alfombras hechas en Kashan. Además, podemos ir a la tetería, la que se encuentra al lado.
Regresamos al hotel para pasar una noche serena.
- Abyaneh
- Hammam-e Sultan Amir Ahmad
Cena y alojamiento en Casa de Ameri o Casa de Manuchehri
Día 8 ; Kashan – Qom – Teherán
En Kashan está el Jardín de Fin (Bagh-e Fin), uno de los jardines iraníes más famosos que pueden visitar durante su viaje a Irán. El Jardín de Fin fue diseñado por Shah Abbas I (1557-1629) como un paisaje terrenal del paraíso. El concepto del jardín persa atrae el alma al escuchar la melodía del agua de manantial desbordándose en canales diferentes y sigue fluyendo. Hoy en día, el estanque central llamado “garganta de camello” (Shotor Galu) se encarga de distribuir el agua a todos los canales laterales, usando la teoría física de los vasos comunicantes. En el siglo XVI, el Jardín Persa se volvió sumamente importante en Irán ya que Shah Abbas lo eligió como lugar para la coronación real. Dos siglos más tarde, los reyes Qajar también eligieron el Jardín de Fin como la sede operativa de la corte. Entre la vegetación del Jardín de Fin, solo los cipreses y sicómoros pueden explicar la simetría y la elegancia de su diseño.
Por otro lado, todavía hay algunos murales extraordinarios en el edificio construidos por los reyes de Qajar que datan de la década 70 del siglo XVIII. Para averiguar los secretos del jardín, hay que pasar por el baño de Fin (Hammam-e Fin), conocido por el suicidio, o mejor dicho, el asesinato de Amir Kabir, el reformista del gobierno de Qajar.
Visitaremos la Mezquita y Madrasa de Agha Bozorg, una escuela de teología cuyo plan arquitectónico es muy peculiar, construido en varios niveles.
Luego, vamos a observar los detalles de la arquitectura bioclimática en otra casa histórica y probamos delicias locales.
Después de una breve parada y tomar un té de agua de rosas, ya llega el momento de salir hacia Qom, una de las ciudades santas de Irán por el sepulcro de Ma´suma, hermana del octavo imán de los chiítas y descendiente del Profeta; Ali ibn Musa ar-Rida, e hija del séptimo imán, Musa ibn Ya´far. Fátima Masumah nació en 789 d.C. en la Medina. Cuando iba a Marv para visitar a su hermano en 816, se enfermó (o fue herida por el saqueo de la caravana y daños hechos) y la llevaron desde Saveh a Qom, donde falleció a la edad de 27 años. Anualmente miles de chiítas de todas partes del Medio Oriente peregrinan al santuario de Masumah en Qom. Dentro del santuario, hay una parte llamada cámara funeraria donde tienen acceso al sepulcro por separado.
A la puesta del sol y sus rayos brillantes, la ruta de regreso a Teherán se hace más notable, como si el viaje a Irán hubiera empezado hace unas horas. Es la hora de hacer la maleta, que vuelve cargada de emoción, entusiasmo y mucha cultura. Normalmente, los viajeros se preocupan por la cantidad de sobrecarga, y mientras el color del cielo oscurece, están pensando en cómo organizar los recuerdos y regalos; a ellos les gusta comprar de todo, desde pistachos hasta telas y piedras turquesas. No hay duda de que todo encajará, excepto una cosa: la hospitalidad de las personas que encontramos caminando en los mercados, sitios antiguos y restaurantes. Esta imagen está grabada en sus corazones y es un recuerdo inolvidable que el viajero llevará consigo a todas partes. Sobre todo, será un buen incentivo para todos aquellos que has disfrutado de este viaje para regresar a Irán por segunda vez.
Traslado al aeropuerto de Teherán, cena y alojamiento en el hotel IBIS en el aeropuerto.
- Mezquita y Madrasa de Agha Bozorg
- Jardín de Fin
- Almuerzo en la casa histórica de Abbasian
- Qom
Hotel Ibis de Teherán
Día 9 ; Teherán– país de destino
Traslado al Aeropuerto Internacional Imán Jomeiní para el vuelo de Teherán hacia el país de destino.
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