Cristal de Alborz

La talla de vidrio, datada de la dinastía aqueménida, es uno de los métodos más originales y comunes de decoración de obras de vidrio. Los artesanos del período sasánida también disponían de gran habilidad en tallar del vidrio, por lo que las obras del vidrio pertenecientes al período islámico estaban influenciadas por las de antigua Persia. De hecho, la talla es el proceso complementario y decorativo más antiguo que se ha llevado a cabo en cristales durante siglos. Pero en Irán, lo que hoy se conoce como el torno de vidrio inició en 1935, cuando se estableció una fábrica de vidrio iraní. En este proceso artístico, se tallan distintos diseños en piezas de cristal utilizando piedras específicas más duras que el vidrio.

Los diseños utilizados en el tallado de vidrio son en su mayoría imaginativos y hechos de memoria, y suelen inspirarse en los pensamientos del tallador, incluyendo principalmente paisley, motivos geométricos y arabescos como las seis estrellas angulares, el sol, etc. La provincia de Alborz es uno de los centros más importantes de producción de cristal en Irán, y los productos mayoritariamente son tarros, vasos, botellas, candelabros, cuencos, platos y ensaladeras.

Arte del Vidrio Soplado de Teherán (Shishegarí)

La industria artesanal del vidrio tiene una larga historia en Irán, y los investigadores datan la antigüedad de esta producción artística al año 2000 a. C. De hecho, los materiales descubiertos en el Zigurat de Choga Zanbil en Susa, Lorestán, Persépolis y otras regiones de Irán han puesto de manifiesto su reivindicación.

Los diferentes métodos de transformación de vidrio son: soplado, moldeado, laminado e hilado. Para producir vidrio mediante la técnica del soplado, se vierten las materias primas en un horno para fundirlas y, una vez fundidas completamente, el artesano sumerge un tipo de varilla, llamado Dam, en el vidrio fundido mientras lo hace girar enrollándolo alrededor de un extremo del soplete, lo cual da lugar a una pequeña burbuja llamada “la primera bola”. En el siguiente paso, se extrae otra pieza del horno envolviéndola alrededor de la primera bola. El artesano crea la forma deseada formando la bola con las herramientas adecuadas, incluidas las tijeras para cortar las hileras del vidrio fundido. A continuación, las piezas talladas se conservan en un arca cuya temperatura es de 45-55° C para enfriarse.

En cuanto a los objetos de vidrio soplado, la variedad es inmensa incluyendo objetos decorativos como candelabros, jarrones, espejos, ventanas, cuencos, ánforas y jarras.