Damavand
El monte Damavand, un volcán inactivo y el punto más alto de Irán, está situado al noreste de Teherán, en la cordillera Alborz. Su cumbre se eleva a una altitud de 5.671 metros. La imagen de este volcán, similar al monte Fuji, está impreso en los billetes de 10.000 riales y en las botellas de agua mineral. En un día despejado y sin contaminación, Damavand se ve desde la ventanilla de los aviones que aterrizan en Teherán.
Damavand, mencionado en la mitol ogía persa, es el lugar donde Rustam, héroe del Shahnamé (la Épica de los Reyes), epopeya persa ambientado por Ferdowsí en el siglo XI, encadenó al demoníaco Zahak. El volcán también es el hogar del simurg, un ave de carácter mítico que se regenera de su ceniza y tiene un efecto curativo. Vinculado a Zal y Rustam, dos de las figuras míticas del Shahnamé, el simurg es el protector de los monarcas legendarios y la soberanía iraní. Siendo un símbolo de la realeza, también representa una figura iniciática iluminada por la luz divina en el esoterismo sufí, incluso por la presencia invisible de Dios. La invasión de los mongoles en Irán estableció la representación del simurg, modelada sobre la del ave fénix.
El monte está equipado con varios refugios de senderismo y podemos disfrutar de su magnífica naturaleza. La carrera de alpinistas iraníes no se cumplimenta sin haber subido esta cumbre.
La zona sur de Damavand ofrece senderos fáciles de recorrer. El punto de partida de los senderos es el pintoresco pueblo de Polur. Para llegar a este pueblo, donde el monte Damavand presume su encanto, podríamos empezar desde Teherán. Este camino conduce a la cumbre.
La parte occidental de Damavand no es tan extensa como la parte sur. Los caminos se hacen un poco más difíciles, pero conservan un gran encanto del paisaje típico de la región. Esta parte es conocida por la imagen que Damavand ofrece a sus visitantes a la hora del atardecer.
La parte norte de Damavand tendría la ruta más difícil principalmente adecuada para aquellos que prefieren la escalada en lugar de excursionismo. Aquí también hay refugios adecuados para los montañeros.
La dificultad de los senderos puede variar en función de la estación.
Comentarios