Minakarí
Esmaltar, brillante arte del fuego
Minakarí se refiere al arte de adornar metales como oro, plata y cobre, a veces también vidrio y cerámica, con materiales de colores opacos o transparentes. De hecho, puede considerarse un arte experimental o de taller que consiste en una serie de interacciones complejas cuyo producto final es un artículo muy especial en su género y de allí su nombre. En Irán, minakarí se elabora principalmente en cobre. Los colores utilizados para los esmaltes se clasifican en tres grupos: colores florales, minerales y metálicos.
La elaboración de la obra sucede en varias etapas:
Primero, se crea la forma deseada utilizando diferentes tipos de martillos.
Segundo, se limpia bien el objeto y se prepara el esmalte.
Tercero, la primera capa de esmalte se aplica completamente en la superficie del objeto deseado y luego, se introduce en el horno a una temperatura de 900º C durante dos o tres minutos.
Cuarto, el color del esmalte se vuelve blanco al enfriarse creando de esta manera la base de la pintura.
Quinto, se hace un boceto de las líneas principales del diseño y luego se pintan las partes restantes.
Sexto, después de la pintura sobre el esmalte, el objeto tiene que ser cocido de nuevo en el horno a una temperatura entre 600º C y 700º C.
Por último, se cubre la pintura con un esmalte transparente, se vuelve a cocer y el objeto está listo.
Actualmente, en Irán, el principal centro de producción de artículos esmaltados se encuentra en la ciudad de Isfahán, y algunos artesanos importantes se dedican a este campo produciendo obras semejantes basadas en el estilo de la pintura esmaltada. El arte del esmalte se aplica mayoritariamente para hacer vasos, macetas, jarrones, tazas, bandejas, relojes, recipientes, tableros, joyeros, etc.
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