El enigma de Alamut

Salida en el vuelo programado a la capital de Irán, Teherán, ubicada al pie de las montañas Alborz. Encuentro en el aeropuerto con el guía de SITO TRAVEL. Traslado al alojamiento y registro de entrada.

Durante el Imperio Persa se construyó una carretera de 3000 kilómetros denominada el Camino Real Persa por el orden de Darío I que conectaba diversas satrapías desde el actual Irán hasta el Mar Mediterráneo, pasando por la actual Turquía.

El Camino Real Persa formaba parte de la mayor ruta comercial conocida como la Ruta de la Seda que se extendía desde la ciudad de Ecbatana en Hamedán hasta el mar Egeo de Esmirna en Turquía. Ejerciendo un control constante, Darío I consiguió garantizar tanto la seguridad y la velocidad de transmitir mensajes como la conexión continua entre todas las satrapías del imperio aqueménida. La ruta tenía varias paradas y los pasajeros ordinarios tardaban tres meses en recorrerla, mientras que los mensajeros imperiales, montando en caballeros, la recorrían en nueve días. Esta ruta sirvió de base principal para conectar el Oriente al Occidente con las conquistas de Alejandro Magno en Asia menor. De hecho, él estableció la ciudad más lejana del Reino de Macedonia, Alejandría, a lo largo del camino y abrió la ruta marítima con su almirante desde el delta del río Indo hasta el Golfo Pérsico.

 Los itinerarios del Camino Real Persa convertida en la Ruta de la Seda hoy en día han sido muy divergentes según las condiciones histórico-económicas de los países que se atraviesan: una vez pasada por el Lejano Oriente, la Ruta de la Seda dirigía a los pasajeros hacia Uzbakistán, Afganistán, Turkmenistán e Irán pasando por Nishapur y Semnan para llegar a Teherán, Qazvín y Tabriz y seguir hacia el mar Egeo de Esmirna. El origen de Qazvín se remonta al apogeo del comercio a través de la Ruta de la Seda en Irán y la reubicación de la capital safávida de Tabriz a Qazvín, lo que lo convirtió en un centro político y comercial.

Por la mañana salimos hacia Qazvín para descubrir sus espléndidos lugares históricos:

•  En nuestra visita, saldremos a dar un paseo por el elegante caravasar Sa´d al-Saltaneh, uno de los lugares más espectaculares del bazar tradicional. Este caravasar de ladrillo contiene varias puertas de entrada dando a las calles, circundantes u otras partes del bazar. Las puertas incluyen un vestíbulo con un hermoso estilo arquitectónico y hay un Chahar-Sough en el sur de esta parte con una cúpula encima. Alrededor de este pasaje en forma de una cruz hay 16 habitaciones con una altura de 1 metro y puertas de madera talladas.

• Mausoleo de Shahzadeh Hossein, un complejo religioso que incluye una mezquita y el mausoleo del hijo del octavo imán de los chiítas quien está enterrado en Mashhad. El mausoleo nos recuerda a un complejo palaciego con un jardín amurallado, hileras de plantas, iwanes pequeños, nichos, lápidas y preciosos adornos de azulejos. La fachada de la puerta principal consta de seis minaretes ornamentales coronados. La tumba está cubierta por una cúpula de azulejos amarillos y azulados. La parte central del edificio está decorada con numerosos mosaicos espejados y el interior está decorado con espejos, cristales y candelabros, elementos típicos de los santuarios.

• El pabellón de Chehel Sotún en Qazvín originalmente formaba parte del primer complejo safávida en 1596, la única obra permanecida de aquel período hasta hoy. En este pabellón, los elementos decorativos de las dinastías safávida y Qajar son claramente distinguibles: azulejos pertenecientes en su mayoría al período de Qajar y pinturas murales de la estructura original safávida en el interior. Este palacio tuvo un papel importante en el adelantamiento de un estilo peculiar durante la época de los safávidades no sólo en Qazvín, sino en Isfahán y Zanyán.

• Terminamos las visitas con la de Puerta histórica de Teherán y la tumba de Hamdullah Mostofi; geógrafo, poeta, célebre y escritor del período iljaní en el siglo XIII. Esta tumba de ladrillo está construida en estilo azerbaiyano debajo de la influencia otomana. La cúpula cónica turquesa se considera la característica única de este edificio. La tumba cuenta con un área de más de 380 metros cuadrados, incluido un patio de 350 metros.

Cena y alojamiento en el hotel.

Carretera paisajística hasta el enigmático Castillo de Alamut (Castillo de Hasan Sabbah), ubicado entre las montañas al borde occidental de la cordillera de Alborz, en un valle cerca de Qazvín en el sur del mar Caspio. En el pasado, parte de estas montañas formaba el distrito de Deylán donde sigue siendo salvaje y remoto. Esta área, ubicado entre la meseta central de Irán y el mar Caspio, constituye una barrera natural formidable. En el lado norte, las laderas están densamente arboladas y hay animales salvajes como jabalí, oso e incluso algunas especies como el tigre del Caspio, la cual está al borde de la extinción.

La historia del castillo de Alamut está radicalmente ligada a la de Hasan Sabbah (1034-1124) y, por lo tanto, será útil saber sobre su ideología y doctrina religiosa ya que era el líder de la secta de los Nazaríes. El poder de los Nazaríes, llamados también hashshashín, cuya fama está en deuda con su estrategia de asesinatos selectivos contra dirigentes políticos y militares, llegó a su apogeo durante la dinastía Fatimí. Hasan Sabbah nació en Qom en el seno de una familia chií duodecimana y recibió educación religiosa desde pequeño. A los diecisiete años, se convirtió al ismailismo, una sub-secta del islam chií, la cual acepta al Imán Ismail en vez de su hermano Mayor Musa ibn Yafar como sucesor del sexto imán, es decir, Yafar as Sádiq. Este misionero ismailí tuvo un conocimiento vasto en la doctrina ismailí y en sus viajes buscaba nuevos adeptos a la fe ismailí y atraía a gente por su piedad. Él se comportaba con gente de manera igual independientemente de la jerarquía y se ganaba la vida mediante distintas profesiones.

Él como misionero ismailí y propagandista de esta fe ganó mucha fama sobre todo en el noroeste de Irán. Nizam al-Mulk, con el que Hasan Sabbah entabló amistad, mandó perseguirlo con el fin de impedir la proliferación de su ideología revolucionaria, pero fue asesinado por un seguidor de la fe. En 1090, consiguió tomar el Castillo de Alamut como la sede del ismailismo. A pesar de la invasión de los turcos selyúcidas y su escaso número, los ismailíes no perdieron su independencia en el castillo en las montañas de Daylán durante 166 años. Por haber vivido en poblaciones hostiles, a menudo los ismailíes fueron víctimas de masacres en los homicidios políticos, los que se denominaban “crímenes sagrados”. Debido a la característica esotérica de estos asesinatos y la obediencia ciega a su líder, los selyúcidas les llamaban hashshashín (los que consumen hachís), derivado en la palabra asesinos.

La biblioteca, arrasada en el ataque de los mongoles, y instalaciones astronómicas de Alamut tenían mucha fama. El castillo cuenta con dos partes: fuerte superior y fuerte inferior. Con la muerte de Hasan Sabbah en 1124, los selyúcidas tomaron el control del castillo.

Cena y alojamiento en una casa tradicional.

Salida hacia Zanyán. En el camino, nos detenemos en el pueblo de Soltaniyeh. Al llegar a nuestro destino, visitaremos el complejo de Bazar, la Mezquita Aljama y el Museo Antropológico de Zanyán.

La cúpula de Santa María del Fiore, también conocida bajo el nombre de la cópula del Duomo de Florencia, fue construida como la cubierta del crucero de una catedral con el mismo nombre en Florencia pertenecientes al siglo XIII y es la más parecida a la Cúpula de Soltaniyeh. La construcción de la catedral Santa María de Fiore comenzó en el siglo XIII por un arquitecto florentino Arnolfo di Cambio, aunque la cúpula seguía siendo un problema más de cien años. Al final, el proyecto se confió a Filippo Brunelleschi, quien erigió la cúpula de doble capa con una altura de 39 metros. Esta cúpula cuya construcción tardó 16 años se considera uno de los logros arquitectónicos más impresionantes del siglo XV. Como ha demostrado Piero Sanpaolesi, la cúpula de Santa María del Fiore con su estructura de doble caparazón puede haberse inspirado en la de Soltaniyeh, ubicada a unos 300 km al sureste de Tabriz, 2000 metros sobre el nivel del mar. Esta ciudad fue la residencia de verano para los ilkanatos, emperadores de un reino que formaba gran parte del Oriente Medio.

La cúpula de Soltaniyeh, con unos 48 metros de altura, se alza desde un base octogonal alto encerrada en una pared de ocho minaretes. El interior de Soltaniyeh es un octágono perfecto, en cada cara del cual hay un iwan grande y alto que en el fondo se divide en dos planos superpuestos: el inferior con una puerta hacia abajo o un nicho y el superior con una logia para mirar dentro. En resumen, cada piso ofrece un panorama distinto. Para conocer los símbolos, motivos florales, geometría, caligrafía y simetría de la arquitectura iraní, hay que contemplar cada esquina de cada piso de la cúpula las que dejarán cualquier visitante sin palabras con su belleza cromática.

• Museo Antropológico: este edificio data del período Qajar, donde se exhibe ropas típicas del pueblo azerbaiyano en la región de Zanyán. En realidad, el museo era un antiguo lavadero tradicional, Rakhtshuy Khaneh, ubicado en la calle principal e histórica de la ciudad. Dado que Zanjan está rodeado de montañas y se encuentra a 1630 m sobre el nivel del mar, tiene una temperatura en su mayoría baja. Así, el lavadero facilitaba el lavado de ropa en un lugar cerrado y cálido y albergaba principalmente a las mujeres de la zona para lavar, secar y remendar ropas. Rakhtshuy Khaneh consta de dos partes: un vestíbulo, dos habitaciones y una entrada y la sala de lavado con forma rectangular y un chorro de agua corriente. Actualmente la planta superior está dedicada a la fabricación de un producto artesanal típica de Zanyán, zapatillas orientales. La palabra babucha deriva de la palabra persa papush (compuesto de pa (pie) y push (cubierta) y, por lo tanto, cubierta de pie o babouche en francés).

• El gran bazar de Zanyán: el duro invierno y el frío extremo son razones fundamentales para la construcción de lugares públicos y bazares en el oeste de Irán. El bazar de Zanyán es un ejemplo importante cuyos detalles son observables en sus bóvedas de ladrillo y pasillos estrechos y menos altos que los de otros bazares similares en zonas calurosas. Las bóvedas impiden el intercambio de calor entre el interior y el exterior y el espacio pequeño del bazar crea un ambiente confortable para las personas que están adentro, de manera que el calor producido por las actividades, lámparas y calentadores puede bajar la temperatura invernal que hace y hacer que el bazar sea utilizable incluso en los períodos fríos del año. Para iluminar y climatizar los pasillos, los techos tienen grietas en la punta que además de que permite la entrada de la luz, crean armonía visual. A lo largo del bazar hay muchas tiendas que fabrican y venden todo tipo de cuchillos, especialmente los plegables típicos de Zanyán.

Cena y alojamiento en el hotel.

La región de Azerbaiyán a pesar de su tamaño pequeño, fue un tipo de ágora internacional, la cual ha observado todos los movimientos geopolíticos de los safávidas y el Imperio otomano, así como la llegada de los evangelizadores cristianos para propagación de la doctrina cristiana. Tabriz desempeña un papel fundamental en la historia moderna de Irán ya que la fase inicial de la Revolución constitucional iraní se desarrolló en esta ciudad.

Hoy en día Tabriz, la capital de la provincia de Azerbaiyán Oriental, no sólo está entre las metrópolis de Irán, sino se considera como un importante centro industrial de azulejos, tractores, textiles y alfombras. Además, la producción de frutos secos de esta ciudad goza de buena fama. La fundación de esta ciudad histórica se remonta al siglo XV a.C. , pero la mayoría de los edificios se han destruido debido a terremotos. Tabriz fue seleccionada como la ciudad más bella de Irán en 2012 y luego fue nombrada capital turística de los países islámicos en 2018. Además de ser la capital política durante varias dinastías como Ilkanato, Kara Koyunlu y Safávida, Tabriz fue el lugar de residencia de la familia real y el príncipe heredero en el período de Qajar. A Tabriz se le atribuyen el título “la ciudad de los primeros” y cuenta con el bazar cubierto más grande del mundo. Desde el punto de vista cultural, lo que resalta la importancia de Tabriz es el intercambio cultural y religioso con países vecinos como Turquía, Armenia y Azerbaiyán. Visitar a Tabriz, nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre cuestiones socio-históricas como la rebelión del tabaco, la revolución constitucional y la crisis económica durante la dinastía Qajar y visitaremos iglesias de los primeros mártires del cristianismo.

Llegada a Tabriz, la capital de Azerbaiyán iraní donde visitaremos:

• El Museo Arqueológico de Tabriz: donde se conserva un repertorio arqueológico de objetos principalmente descubiertos en las excavaciones de Azerbaiyán exhibiéndose en tres salas principales. Esta colección nos informa cómo el arte persa ha sido transmitido al Occidente. Sin lugar a duda uno de los departamentos más interesantes es el de cerámica y terracota datando de los siglos XII y XIII d. C., durante los que la caligrafía persa tuvo implicación artística utilizada con fines decorativos. Además del Museo Nacional de Irán en Teherán, éste tiene la más amplia colección perteneciente a distintos períodos de la historia persa.

• La Mezquita Azul: fue construida en 1465 bajo el orden del gobernante Jahan Shah, rey de la dinastía Kara Koyunlu y amante del arte. En realidad, esta mezquita fue un gran complejo que contenía una biblioteca, un convento de derviches, un jardín, spas y un mausoleo. La mayor parte de la mezquita fue destruida en un terremoto en el siglo XVIII y dos siglos más tarde con la colaboración de distintas organizaciones empezó su reconstrucción la cual dio lugar a que hoy una parte se mantuviera en pie. El estilo particular de esta mezquita, muy diferente a otras, es conocido como el estilo azerbaiyano. El dicho estilo, también inusual en el mundo persa, confirma la influencia relevante de los otomanos en Tabriz. Entre las descripciones de los fotógrafos que han fotografiado esta mezquita, incluido a Luigi Montabone, mencionamos la de Ella Maillart: “ese sentimiento particular de cuando estás enamorado y crees que nunca has entendido, hasta entonces, el esplendor del cielo a medianoche cuando las estrellas, no iguales a la otra, brillan con tal brillo que parecen venir hacia nosotros. Ese mosaico extraordinario te hace soñar con un rincón donde cada estrella es una flor colorida”.

• El Bazar de Tabriz: un complejo extraordinario que abarca unos 35 km de pasarelas cubiertas con más de 7000 tiendas, 24 caravasares y 28 mezquitas. La actividad principal en el bazar era la fabricación de alfombras, aunque también es conocido por la fabricación de joyas y orfebrería, la venta de frutos secos, especias y el queso famoso de la región llamado Liqvan. La mayoría de la compra y venta de los ciudadanos tenía lugar en este bazar debido a que poseía todos los sectores adecuados para llevar a cabo actividades económicas como: tiendas, talleres, almacenes, casas comerciales y caravasares mientras que la segunda parte del bazar estaba dedicado a lugares relacionados con las actividades socio-religiosas como: mezquitas, escuelas coránicas, espacios dedicados a ceremonias religiosas, deporte antiguo (Varzesh-e Pahlavani), teterías y tabernas. Desde el punto de vista arquitectónico, los edificios del bazar tenían una forma adecuada para las temperaturas bajas de invierno. En resumen, este laberinto comercial podrá hacernos perder horas y horas en su hermosura donde tendremos una experiencia sensorial única. Para embriagarse con el aroma de canela recién molida, la lana de alfombras en Saray-e Mozaffari, queso fresco y el pan barbarí, pan típico del pueblo azerbaiyano de Irán, recién horneado basta con caminar y respirar profundamente.

Cena y alojamiento en el hotel.

A menudo los turistas viajan a Irán no sólo con el fin de visitar Persépolis, sino los monumentos de la cultura islámica, la opulencia de las mezquitas del período islámica y en general algo que esté vinculado de algún modo a los rituales del islam. Todo esto, por supuesto, es comprensible, pero no debemos pasar por alto la presencia de las minorías religiosas y sobre todo los lugares de culto donde practican su fe. Para dar un ejemplo, también deberíamos saber en el noroeste de Irán hay varias iglesias antiguas reconocidas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. En Irán la población limitada de los católicos se divide en tres ritos diferentes: asirio-caldeo, armenio y latino, y cinco diócesis. De la población iraní; 98.79% son principalmente chiítas (incluyendo 5-10% sunitas), 0.37% cristianos y 0.84% otros (incluyendo zoroastrianos y judíos). El criterio que hace fascinante esta mezcla religiosa es la llegada de las religiones a Irán, la difusión de la fe y la construcción del lugar de culto, los que se encuentran en áreas distintas en función de la presencia de las comunidades relacionadas. Por ejemplo, en el área central y sureste se encuentran los templos de fuego zoroástricos mientras que en el noreste y en Isfahán hay iglesias católicas y en la parte occidental de Irán está la Tumba de Ester y Mordejai, lugar de culto por excelencia de judaísmo.

• Continuamos el viaje con la visita de la catedral de San Stefano, una catedral armenia que se remonta al siglo IX d. C. La iglesia está ubicada en una zona montañosa donde el río Aras serpentea en el valle de la frontera iraní muy cerca de la República Autónoma de Najicheván. De hecho, el monasterio se encuentra en medio de la naturaleza exuberante de la zona fronteriza y es una síntesis de la arquitectura iraní y bizantina la que más tarde fue conocida por el estilo peculiar de la arquitectura armenia típica. Su campanario octogonal tiene el color salmón (rosa anaranjado) por las piedras de las montañas rocosas circundantes. Como el monasterio tiene un portal de madera y hierro, una valla amurallada, y una serie de torres por las cuales se llevaba a cabo la vigilancia nocturna, se parece a una fortaleza desde lejos. Al lado de la sala de oración hay de planta cuadrada donde hay muchas habitaciones para albergar seminaristas que pasaron una parte de su vida siguiendo los cursos de la escuela religiosa del monasterio. Esta área ha sido la ruta de tránsito para comerciantes, ejércitos y devotos.

Regreso a Tabriz. Daremos un paseo por el jardín de Shah Goli, llamado también El Goli. El Goli es la mayor reserva de agua para regar los jardines de Tabriz hasta la puerta de Teherán. Durante el período safávida en el siglo XVI, sufrió algunos cambios y se construyó un edificio de dos pisos en medio del estanque bajo el mando del gobernador de Tabriz y el hijo de Abbas Mirza, príncipe heredero de Irán. Hoy en día, el edificio junto con el parque y el estanque de El Goli forman lugares de interés en Tabriz.

Cena y alojamiento en el hotel.

Salida hacia Ardebil. En el camino hay la posibilidad de encontrarnos con la tribu de Shahsavan en Namin. Los nómadas de Shahsavan, cuyo origen está ligado al mando de Shah Abbas en el siglo XI, se encuentran en el área de Azerbaiyán iraní, ubicada en el norte de Irán, cerca del río Aras y la llanura de Mogán. Etimológicamente, la palabra Shahsavan significa seguidores del shah (aquí se refiere al rey de la dinastía safávida, el que les dio permiso para vivir esta zona). Sin embargo, debido a los conflictos bélicos primero con los otomanos y luego con los rusos, emigraron a las zonas céntricas de Irán como Varamín, Hashtrud, Saveh, Teherán y Qazvín. Desde el punto de vista antropológico, los shahsavanos son una comunidad nómada de ascendencia turca de la rama Oghuz, aunque también hay muchos kurdos, georgianos y tayikos entre ellos.

Llegada a Ardebil visitar el conjunto del Khanegah y del santuario del jeque Safi Al Din Ardebili (siglo XV).

La existencia de la figura mística del jeque Ishaq Safi-al-din Ardebili, mentor y maestro de la hermandad sufí-islámica en su sede en Ardebil, resultó en la fortaleza de la dinastía safávida. Esta figura es reconocida por su ideología religiosa convertida más tarde en la religión oficial del imperio safávida. De hecho, el islam chiíta y su desarrollo en Irán tiene su origen en el estudio ideológico y la escuela de pensamiento del mentor de la escuela religiosa de Ardebil.

• El mausoleo de Sheikh Safi Al Din en Ardebil se considera uno de los mausoleos más importantes de Irán. Su fama se expandió de tal forma que muchos políticos, viajeros, escritores y comerciantes viajaron desde Alemania, Francia y Gran Bretaña a Irán para visitar Ardebil y escribir sobre el santuario. En la construcción del mausoleo, comenzada a principios del siglo XVI y finalizada a finales del siglo XVIII, han sido utilizadas formas arquitectónicas tradicionales iraníes. Los constructores de este complejo aprovecharon al máximo el espacio pequeño con el fin de proporcionar varias secciones que han servido para múltiples funciones incluyendo una biblioteca, una mezquita, una escuela, mausoleos, una cisterna, un hospital, cocinas, una panadería y otras oficinas. El sitio incorpora un camino que conduce al santuario en siete segmentos reflejando las siete etapas de la mística sufí. Las partes distintas del mausoleo están separadas por ocho puertas, que representan las ocho actitudes del sufismo. También hay fachadas e interiores recién decorados, así como una colección notable de objetos antiguos que se exhibe en la sala lateral junto a las tumbas del jeque Safí y Shah Ismail, el fundador de la dinastía safávida.

Shah Ismail tenía un talento encomiable en el ámbito militar por lo que logró reunificar los estados autónomos, pequeños monarcas o feudales existentes en el territorio iraní. Además, abrió una nueva etapa de relaciones internacionales con la República de Venecia, el papado de Roma y Francia; en otras palabras, demostró su interés diplomático en los países europeos. Por otro lado, el peligro del ataque de los otomanos amenazaba constantemente a los safávidades y a otras dinastías iraníes hasta la derrota de los otomanos en conflictos bélicos.

Según Tavernier, el famoso viajero francés que vivió en Irán durante el reinado de Shah Abbas; a pesar de que había tierras muy buenas alrededor de Ardebil para cultivar uvas, no había desarrollado la industria vitivinícola en esta ciudad. Es decir, en esta ciudad había normas muy estrictas con respecto a la prohibición del consumo de alcohol. Desde su punto de vista, tal comportamiento se derivaba de la presencia del jeque Safí y el respecto por él.

Adam Olearius expuso que debido a la santidad de Sheikh Safí al Din, el uso de oro y plata estaba prohibido, por consiguiente, en los días de luto de imán Hossein u otras ocasiones se usaban cucharas y platos de madera o cerámica.

El Bazar de Ardebil era una encrucijada comercial debido a que conectaba la calle de Tabriz a los países ribereños del mar Caspio. La posición estratégica, las montañas y las llanuras extensas de Ardebil enriquecen este bazar que cuenta con tiendas de alfombras, herbolarios y una variedad notable de miel.

Cena en un restaurante y alojamiento en el hotel.

Continuamos el viaje hacia el mar Caspio recorriendo la ruta de Heiran para ingresar a la región exuberante de Guilán. La cultura de la gente de Guilán es muy diferente a la de los azeríes porque procede de la cultura caucásica. Bajando de las montañas, veremos la laguna de Bandar Anzalí, ciudad portuaria del mar Caspio. Esta región goza de pura naturaleza, paisajes intactos, historia y riqueza de los recursos naturales. En cuanto a la gastronomía, el arte culinario del Caspio hace de esta zona una de las más destacadas contando con una variedad extensa en comparación con el resto del país. En Guilán probamos los platos más típicos de esta zona que en su mayoría llevan arroz iraní, pescado fresco, ganso o guisado y ternera marinada junto con hierbas aromáticas y la sabrosa salsa de granada. Aproximadamente 11 millones de personas habitan en las costas del mar Caspio, y los principales centros urbanos se encuentran en las costas meridionales y occidentales de las ciudades costeras de Irán.

Desde el punto de vista geográfico, el mar Caspio es el lago más extenso del mundo con un porcentaje de salinidad superior al 13.7 %. Históricamente, el mar Caspio fue la frontera entre Europa y el Medio Oriente, una barrera que ha favorecido el intercambio intercultural entre los pueblos de sus orillas con el paso del tiempo. En la zona meridional, principalmente en Irán, la costa está formada por finas arenas y limos y el paisaje puesto ante nuestros ojos es una costa de terrazas ascendentes paulatinamente por las sierras de Alborz. La diversidad biológica del mar Caspio con un alto grado de endemismo lo convierte en uno de los ecosistemas más preciados en mundo. Cabe destacar que los bosques hircanos en la costa meridional de este mar han sido registrados en la Lista del Patrimonio de la UNESCO.

Por último, debemos mencionar el recurso pesquero más importante para la economía del mar Caspio, es decir, el esturión. Lo más grandes miden más de 4 metros, pesan aproximadamente 500 kilos y se alimentan de gobios, sábalos y carpas. El caviar iraní junto con el pistacho y el azafrán crean los productos más destacables de Irán.

Salida hacia la aldea de Masuleh situada en medio de las montañas, muy cerca de Rasht, en las laderas rocosas. El estilo peculiar de esta aldea hace que el techo de la casa inferior sea el patio de la casa superior y las áreas frontales de las casas y los techos se usan como aceras. Los materiales utilizados en la construcción de las casas en su mayoría son piedras en formas irregulares junto con mortero de barro y cal. Este tipo de viviendas representa el conocimiento de generaciones pasadas para adaptar las condiciones geográficas a la tecnología constructiva. Esta aldea se encuentra entre las aldeas más pintorescas de Irán gracias al control constante del Ministerio del Patrimonio Cultural para conservar su encanto eco-arquitectónico.

Cena en un restaurante y alojamiento en una casa tradicional de la aldea.

Salida hacia Teherán, visita a la ciudad de Fuman y la ciudad de Rasht, capital de la provincia de Guilán.

Rasht comenzó su desarrollo a finales del siglo XIV cuando el enfoque se colocó en llanuras para establecerse en vez de montañas. Hasta el siglo XVII, cuando Rasht fue elegido como la capital de Guilán, Fuman y Lahiyán eran las ciudades principales de esta provincia. Rasht, la ciudad más grande en la costa del mar Caspio, está situado en el corazón de Guilán. John Bell, al pasar por Rasht en 1717, lo describió no como una ciudad, sino más bien una aldea grande con casas a distancia entre sí en una llanura rodeada por bosques. Los rusos dejaron una gran influencia en la historia de Guilán, invadir esta ciudad en 1722 y despejar el bosque al sur cerca de las montañas, pero Rasht mantuvo su aspecto rural bajo el reinado de Naser al-Din Sah Qajar. En aquel momento, las casas señoriales estaban agrupadas a ambos lados de la plaza central, y los humedales, bosques, arrozales, plantaciones de té verde y moras y viveros de gusanos de seda rodeaban la ciudad.

Hoy en día, Rasht demuestra su encanto particular y tejido urbano donde hay uno de los bazares más rústicos en todo Irán. El entorno rural de Rasht impidió que se convirtiera en una ciudad cosmopolita durante mucho tiempo, sólo en el siglo XIX bajo la dinastía Qajar y los rusos creció su cosmopolitismo. El estilo arquitectónico de la Plaza Central y las calles principales de Rasht representan la fuerte influencia rusa que será reconocible a primera vista. Al contrario, el orgullo histórico de Rasht se jacta de la resistencia de los partisanos de Guilán (1918-20) con Mirza Kuchak Khan, la cabeza de los partisanos durante la invasión rusa de Irán.

A la puesta del sol y sus rayos brillantes, la ruta de regreso a Teherán se hace más notable, como si el viaje a Irán hubiera empezado hace unas horas. Es la hora de hacer la maleta, que vuelve cargada de emoción, entusiasmo y mucha cultura. Normalmente, los viajeros se preocupan por la cantidad de sobrecarga, y mientras el color del cielo oscurece, están pensando en cómo organizar los recuerdos y regalos; a ellos les gusta comprar de todo, desde pistachos hasta telas y piedras turquesas. No hay duda de que todo encajará, excepto una cosa: la hospitalidad de las personas que encontramos caminando en los mercados, sitios antiguos y restaurantes. Esta imagen está grabada en sus corazones y es un recuerdo inolvidable que el viajero llevará consigo a todas partes. Sobre todo, será un buen incentivo para todos aquellos que has disfrutado de este viaje para regresar a Irán por segunda vez.

Llegada a Teherán. Cena y alojamiento en el hotel.

Teherán es la capital del Irán y también la ciudad más dinámica y próspera del país. Con una población superior a los 13 millones de habitantes, Teherán presenta la atmósfera bulliciosa propia de cualquier gran capital del mundo, al tiempo que se revela como la piedra angular de la historia contemporánea de Irán y ofrece una extraordinaria oferta cultural al viajero, entre la cual destaca el espectacular museo nacional de joyas, donde se expone la más importante colección de joyas preciosas del mundo.

La preocupación iraní por los desarrollos artísticos, las recientes intervenciones arquitectónicas y el resurgir de muchos cafés de estilo tradicional han hecho de la ciudad un fascinante laberinto que reserva al visitante una sorpresa en cada rincón.

Visitando Teherán:

• El Museo Nacional de Irán exhibe historia, arte y cultura a través de hallazgos arqueológicos fechados desde el sexto milenio a.C. hasta la llegada del islam en el siglo VII de nuestra era. El museo atesora una maravillosa colección de piezas de cerámica y bronce y, además, programa dos exposiciones temporales al año en colaboración con relevantes museos internacionales como los de Berlín o Venecia.

• El Palacio de Golestán se encuentra junto al Gran Bazar y se trata de un imponente complejo palacial con origen en el siglo XVI, cuando Teherán comenzó la transformación que le llevaría a pasar de ser un pequeño pueblo a convertirse en una verdadera ciudad. El significado de Golestán es “campo de flores”, nombre que hace honor a los maravillosos jardines persas presentes en el lugar. La historia contemporánea de Irán está tan en deuda con este complejo que Mohammad Reza Pahlavi, el último shah de Irán, celebró aquí su coronación, anunciándose como sucesor de Ciro el Grande. Después visitaremos la entrada del Gran Bazar de Teherán, donde, entre sus 10 kilómetros de galerías, se dice que es posible encontrar cualquier objeto imaginable.

• El Museo Nacional de Joyas (abierto solo de sábado a martes) se encuentra protegido por una gran estructura de acero de 25 cm de espesor en las profundidades subterráneas del Banco Nacional Central de Irán. El museo alberga las joyas de la realeza persa, todo tipo de piedras preciosas, una gran variedad diademas y tiaras, así como las coronas de las dinastías Pahlavi y Qajar y el diamante rosa más grande del mundo, Darya-e Nour (182 quilates). Este diamante fue traído a Irán como símbolo de las campañas victoriosas de Nader Shah en la India en 1739.

La visita al Museo Nacional de Joyas puede sustituirse con el Museo de la Alfombra.

Cena y alojamiento en el hotel.

Traslado al Aeropuerto Internacional Imán Jomeiní para el vuelo de Teherán hacia el país de destino.