Abarkuh

Abarkuh 

Abarkuh es una de las ciudades más antiguas de Irán, situada en el centro del país y en la provincia de Yazd. La presencia de numerosos yacimientos arqueológicos atestigua una antigua civilización.  Como esta ciudad se construyó primero al pie de montaña, kuh en persa, fue llamada “Berkuh” (junto a la montaña), lo que más tarde se convirtió en “Abarkuh” en lenguaje popular. Con el paso del tiempo, la ciudad oficialmente fue denominada “Abarkuh”. En diversas fuentes antiguas y recientes ha sido mencionada “Abarqu”, “Abarkuyeh”, “Abarquyeh”. Además de los yacimientos arqueológicos, Abarkuh, debido a su posición geológica y las características de su tierra, produce uno de los mejores albaricoques de Irán. Entre los meses de junio y julio, los agricultores venden esta dulce y sabrosa fruta en camiones a los lados de las carreteras urbanas, o también se puede disfrutar de ella como fruta seca.

Ciprés

La primera maravilla de la ciudad es un ciprés centenario que, según los expertos, incluido un famoso científico ruso, tiene casi 4000 años. Este famoso ciprés, también conocido como ciprés de Abarkuh, sigue siendo verde y robusto y, con su majestuoso tronco y magnífica altura, se alza en el corazón de la ciudad. El antiguo ciprés se encuentra en la parte sur de la ciudad, y se dice que su altura alcanza casi 28 metros y la circunferencia de su tronco es de 11,5 metros. El ciprés de Abarkuh es una de las maravillas de la naturaleza que, con sus raíces en la tierra y su lenguaje silencioso, nos cuenta su historia milenaria.

Casa de hielo y adobe

Viniendo de Shiraz a Abarkuh -en el camino a Yazd- en la carretera principal, hay una gran construcción cónica llamada Casa de Hielo Aghazadeh.

Las casas de hielo (también llamadas neveras en algunas ciudades) suelen ser construcciones de ladrillo de planta circular y cónica. La razón por la que recibió el nombre de Yakhchal en persa (pozo de hielo) es que se trata de un pozo en forma de cuenco, cavado para almacenar hielo. Estas estructuras se construyeron con el objetivo de producir y almacenar hielo, de modo que en las frías noches de invierno el agua almacenada en los depósitos, situados cerca de la construcción, se congelaba y los bloques de hielo se rompían, se transportaban y se almacenaban dentro de la casa de hielo. Este proceso continuaba hasta que el tanque se llenaba y la superficie del hielo quedara al nivel de la entrada. La forma cónica de la casa de hielo permitía almacenar hielo para utilizarlo en verano.

Gonbad-e Ali

Sobre la Montaña Blanca, al sureste de Abarkuh, hay una especie de torre/cúpula llamada Gonbad-e Ali. Esta construcción octogonal se considera el símbolo único y relevante de la ciudad histórica de Abarkuh. Se trata de un monumento de piedra y mortero de yeso de planta octogonal. En el exterior se ha aplicado un revestimiento de ladrillo que demuestra las características y la rara belleza de las decoraciones. En el interior de la torre, unos escalones conducen a la cámara funeraria, que era el lugar de enterramiento de los propietarios del mausoleo. El grosor de las vigas es de 1,5 metros y la altura del edificio es de 22 metros.

Casa Aghazadeh

Una de las casas más valiosas de Abarkuh y de Irán es la Casa Aghazadeh que puede considerarse el símbolo de esta ciudad histórica. La Casa Aghazadeh está situada en la parte sur de la ciudad. Esta casa, junto con otras casas históricas, formaba un magnífico conjunto y consta de dos partes: una interior y otra exterior bien separadas entre sí. Uno de los espacios singulares de esta casa es, sin duda, la torre de viento de dos plantas. Esta torre es un modelo ejemplar, ya que hay pocas casas históricas en Irán con una joya brillante que mostrar. El edificio data del periodo kayar y pertenecía a Aghazadeh, una de las personas más importantes y ricas de la ciudad.

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